Para promover un ambiente adecuado para el aprendizaje al interior del aula es importante considerar en primer lugar, el espacio, la distribución del mobiliario, puesto que estos son los elementos que contribuyen a las relaciones que se dan al interior del aula, ayudan a la construcción del conocimiento y colaboran con el éxito de las situaciones de aprendizaje. Además el ambiente es importante porque afecta en todo lo que hace el niño, influye en su actividad, en su trabajo, en sus elecciones, en la forma de utilizar los materiales así como en las relaciones con los demás. La organización del espacio de un aula, la disposición del mobiliario y de los materiales según mi opinión, motiva a los niños a moverse en una u otra dirección, en un determinado lugar o cambiarse a otro, escoger los materiales, comunicarse, desplazarse, cambiar de materiales. Es fundamental que los docentes de educación preescolar estén conscientes de la importancia de los espacios al planificar su trabajo, y se preocupen por la manera en que son ordenados, para que se conviertan en estimulantes de la actividad del niño.
En el ambiente de aula es posible mirarlo desde dos puntos de vista, el afectivo y el físico, es así como el ambiente físico se relaciona con el conjunto de relaciones interpersonales que se dan en el aula, y el espacio físico en el que se lleva a cabo la labor educativa a través de objetos, olores, formas, colores, sonidos y personas que habitan y se relacionan para poder generar que el alumno se sienta conforme con sus ideas, y realice de este modo una mejor recepción de los contenidos que recibe del profesor en el aula.
El ambiente del salón de clase es importante, ya que este es el sitio en que se llevan a cabo la mayoría de las actividades que se realizan, por eso es fundamental que este favorezca la estimulación en las áreas del desarrollo socio afectivo, sicomotora y cognitiva del alumno.
El tamaño del aula debe ser lo suficientemente grande como para que los niños puedan recorrerla libre y cómodamente al trabajar, así como poseer la capacidad de albergar el mobiliario y material necesario para favorecer la labor educativa. Otro aspecto a destacar para la convivencia considerando lo del aula, es que la sala tenga una buena ventilación e iluminación natural. También como parte del ambiente la decoración es un aspecto muy importante por considerar; asimismo los murales y el material para colocar en las paredes debe ubicarse al alcance de las miradas de los niños. En caso de que este material sea elaborado por el docente, es conveniente que se utilicen elementos cercanos a la realidad del alumno y con pertinencia cultural.
Una ayuda para que el niño alcance el aprendizaje seria que este siempre formule las preguntas, pues él es el especialista, el que conoce y sabe cómo se relacionan los conceptos, sabe además cuáles son los conocimientos nuevos que le permiten relacionarlos con los que ya posee para que así exista el aprendizaje significativo. Sólo descubriendo cuáles son los conceptos que posee el estudiante se le puede orientar la adquisición de nuevos conceptos.
La idea también es establecer en el aula un clima de relaciones respetuosas y de confianza entre los alumnos, dando la posibilidad igualitaria de participación, la tolerancia, la solidaridad y el respeto como valor fundamental presidan cada una de las acciones pedagógicas y logren imponerse a cualquier diferencia ya sea étnicas, sociales, culturales, económicas, que puedan entorpecer el logro de los objetivos trazados. Por supuesto que, para lograrlo se requiere usar en el aula normas lo suficientemente consistentes y coherentes con este objetivo, diseñando estrategias de intervención prácticas para cuando se quebrantan dichas normas.
Es así como para establecer las mejores condiciones ambientales y el logro de los aprendizajes en nuestros alumnos, tanto en lo personal y social, como en los medios técnicos y de infraestructura involucrados, deben formar parte de nuestra planificación y ocupación.